Con el mayor de los cuidados y haciendo uso de los conocimientos adquiridos en las formaciones regladas, el cuidador profesional, trata con técnica y mimo la piel de la persona a la que cuida. De esta manera, no solo consigue una piel sana, sino que evita una de las lesiones más temidas. ¿Sabes de que hablo? ¡Exacto! De las úlceras.
Pero, no todos tenemos conocimientos profesionales. Tanto es así que en ocasiones podemos obviar este cuidado. ¿Te has preguntado cómo cuidas la piel de tus mayores? Los lugares más susceptibles de aparecer las úlceras son las zonas de presión. En esta ilustración puedes ver cuáles son.
¿Sabes qué hacer para evitarlas? Te ofrezco unos consejitos
- Procura que la persona a que cuidas, tenga una alimentación equilibrada. En caso de aparecer úlceras, procura que la dieta sea rica en proteínas.
- Realiza cambios posturales cada 1.5 o 2 horas. Así facilitarás la circulación de la persona dependiente.
- Usa gel dermoprotector en la higiene diaria y cremas hidratantes a diario. De esta manera la piel estará flexible e hidratada.
- Mientras aplicas la crema, procura masajear la zona, prestando especial atención a las zonas de presión.