En la entrada de esta semana hablamos del concepto de envejecimiento activo, así como una serie de consejos para lograrlo. Pero, antes de todo, ¿qué significa este concepto?
El concepto de envejecimiento activo fue introducido por la Organización Mundial de la Salud (OMS), cuya definición es “el proceso de optimización de las oportunidades de salud, participación y seguridad con el fin de mejorar la calidad de vida a medida que las personas envejecen. El envejecimiento activo se aplica tanto a los individuos como a los grupos de población. Permite a las personas realizar su potencial de bienestar físico, social y mental a lo largo de todo su ciclo vital y participar en la sociedad de acuerdo con sus necesidades, deseos y capacidades, mientras que les proporciona protección, seguridad y cuidados adecuados cuando necesitan asistencia”
Sin embargo, el envejecimiento activo no solo consiste en hacer ejercicio o seguir una dieta sana, sino que también se ocupa de aspectos personales como la mejora y prolongación de la autonomía personal, la autoestima, la formación continua… Por lo tanto, se puede decir que el envejecimiento activo está formado por cuatro pilares: Salud, Participación social, Seguridad y Aprendizaje.
Una vez conocido el concepto de envejecimiento activo, os proporcionamos una serie de consejos basándonos en los cuatro pilares anteriormente mencionados para llevarlo a cabo.
- Hacer ejercicio diariamente. El primer consejo que os damos es realizar ejercicio regularmente, al menos 30 minutos de actividad aeróbica al día. El deporte o la actividad a realizar tiene que estar acorde con el estado físico y la salud de cada persona. Puedes salir a andar, ir a la piscina a nadar, hacer ejercicios en casa… Lo esencial es mantener el cuerpo en movimiento.
- Tener una dieta sana y equilibrada. Las dietas estrictas pueden ser perjudiciales para nuestra salud. Lo principal es tener una dieta variada y con cantidades recomendadas de frutas y verduras, proteínas, legumbres y cereales.
- Mantener la mente activa. Actividades como la lectura, aprender idiomas o hacer puzles y crucigramas ayudarán a mantener tu mente más activa. Actualmente hay muchas formas de mantener la mente activa. Busca la actividad que más se encaje a tus gustos y preferencias.
- Crea hábitos saludables. Llevar una rutina cada día crea hábitos saludables. Es importante crear estas rutinas en una edad temprana.
- Cuida tu salud. Ve al médico las veces que haga falta. Es fundamental conocer nuestro de estado de salud actual de cara al futuro. De esta forma, si haces actividad física, los chequeos médicos te asegurarán si puedes seguir con tu rutina o debes cambiarla.
- Mantén las relaciones sociales. Ser mayores no tiene que ser el fin de la etapa social, sino todo lo contrario. Es la etapa perfecta para conocer gente nueva con la que realizar actividades y, por supuesto, para disfrutar de la familia y de los amigos.
- Ten una ocupación. Con esto no nos referimos a que tengas un trabajo justo después de la jubilación, sino que tengas aficiones y realices actividades de ocio. Estas actividades las puedes hacer dentro o fuera de casa y pueden ser, para poner ejemplos, el bricolaje, la fotografía, pintar, hacer costura, etc.
Con todos estos consejos, podrás llevar a cabo un envejecimiento activo y saludable.