El marco conceptual del emprendimiento social es bastante amplio y abarca una gran cantidad y variedad de iniciativas y formas jurídicas. En ese sentido, los emprendimientos sociales se pueden llevar a cabo a través de asociaciones, fundaciones o inclusive por medio de empresas en los casos de aquellas que toman la iniciativa de crear un área de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), para llevar a cabo proyectos de desarrollo social, por lo que esta última forma también puede considerarse de alguna manera como emprendimientos sociales.
De acuerdo a Isabel Serrano, de Vinculo&Co: “La principal diferencia entre un emprendedor de negocios y un emprendedor social es que el objetivo del primero es el beneficio económico, obtención de ganancias; mientras que el emprendedor social tiene por motivación los deseos de brindar ayuda social mediante proyectos que beneficien a sectores desfavorecidos en la sociedad”.
Las asociaciones y fundaciones nacen con esa finalidad, es decir, su razón de ser, su prioridad es llevar a cabo proyectos de beneficio para determinados sectores identificados como vulnerables o con necesidades específicas. Es así como los más comunes son los emprendimientos de ayuda social, ambiental y cultural.
Para clarificar un poco más el concepto, también se puede decir que el emprendimiento empresarial es aquel cuya prioridad es siempre generar ganancias, las cuales por supuesto no son utilizadas para ayuda social, ya que crear valor es algo secundario y difuso, sino que lo que las empresas buscan es la obtención de beneficios económicos para sus propietarios. También se dirigen a un mercado que puede pagar por sus productos y servicios.
Por el contrario, el emprendimiento social es aquel donde predomina una misión social, enfocarse en nuevos ámbitos más sociales como pueden ser: el medio ambiente, la cultura, la cooperación al desarrollo del territorio. Además, se centra en el impacto social directo.
“El emprendedor social tiene como objetivo crear un beneficio transformacional y de gran escala que ayude a solucionar las necesidades de un segmento importante de la sociedad o de la sociedad en general”, menciona Serrano.
La propuesta de valor del emprendedor social tiene como público objetivo una población marginada o muy desfavorecida. –
Fuente
http://www.laprensagrafica.com/2016/12/26/es-la-practica-que-responde-a-las-necesidades-de-la-sociedad-con-propuestas-innovadoras-y-financieramente-sostenibles-diseadas-para-resolver-problemas-sociales
