La dependencia emocional es un patrón de comportamiento que se caracteriza por la necesidad excesiva de la atención, la validación y el afecto de otra persona, hasta el punto de que la falta de esa atención provoca ansiedad y malestar emocional. Aunque este patrón de comportamiento puede aparecer en cualquier edad, es más común en personas mayores debido a diferentes factores como la soledad, la pérdida de pareja o amigos, la jubilación, la enfermedad, entre otros.
Causas:
La dependencia emocional en personas mayores puede tener diferentes causas, tales como:
- Soledad: después de años de trabajar y tener una vida social activa, la jubilación y la pérdida de amigos o familiares pueden dejar a una persona mayor sintiéndose sola y necesitada de compañía.
- Enfermedades y pérdida de movilidad: las personas mayores que han perdido la capacidad de moverse o de hacer actividades físicas, pueden sentirse aisladas y emocionalmente dependientes de aquellos que les brindan asistencia.
- Pérdida de pareja: la muerte del cónyuge puede generar un gran vacío emocional en la persona mayor, lo que puede llevar a buscar de manera desesperada el afecto y la atención de los demás.
Síntomas:
Los síntomas de la dependencia emocional en personas mayores pueden variar, pero algunos de los más comunes incluyen:
- Necesidad excesiva de la atención y el afecto de otra persona, hasta el punto de que la falta de esa atención provoca ansiedad y malestar emocional.
- Miedo a la soledad y a la separación de la persona en la que se depende emocionalmente.
- Baja autoestima y falta de confianza en sí mismo.
- Dificultad para tomar decisiones y hacer cosas por su cuenta.
- Preocupación excesiva por los sentimientos y necesidades de la otra persona.
- Miedo a la crítica y a la desaprobación de la otra persona.
Consecuencias:
La dependencia emocional puede tener consecuencias negativas en la vida de la persona mayor, como:
- Aislamiento social: la persona mayor puede depender tanto emocionalmente de otra persona que pierde contacto con el mundo exterior, lo que puede llevar a un mayor aislamiento social.
- Dificultad para establecer relaciones sanas: la dependencia emocional puede afectar la capacidad de la persona mayor para establecer relaciones saludables, ya que pueden sentir que necesitan a otra persona para sentirse bien consigo mismos.
- Depresión y ansiedad: la dependencia emocional puede aumentar los niveles de ansiedad y depresión, especialmente si la persona no puede obtener la atención o el afecto que necesita.
- Abuso emocional: algunas personas pueden aprovecharse de la dependencia emocional de una persona mayor para manipularla y abusar emocionalmente de ella.
- Pérdida de la independencia: la dependencia emocional puede impedir que la persona mayor se sienta capaz de hacer cosas por sí misma, lo que puede llevar a una pérdida de independencia.
En conclusión, la dependencia emocional en personas mayores puede tener diversas causas y síntomas, pero todas tienen consecuencias negativas en su calidad de vida. Por eso es importante que las personas mayores aprendan a desarrollar su autoestima, independencia y a establecer relaciones salud.