Stand by, o modo en espera, es esa función que tienen casi todos los electrodomésticos que de manera más frecuente usamos en los domicilios. Es esa luz que indica que a pesar de seguir consumiendo energía, el aparato está funcionando y se encuentra a la espera de recibir órdenes.
Se calcula que casi un 15% del consumo de una vivienda se produce por aparatos electrónicos conectados en stand by. Se recomienda que para ahorrar energía, averías, dinero y evitar contaminación se desconecten los aparatos electrónicos de manera que cuando no se vayan a utilizar queden totalmente desconectados de la red eléctrica.
El uso inadecuado de los electrodomésticos y aparatos eléctricos nos hace, en cierto modo dependiente. Por eso tenemos la necesidad, o costumbre, de tenerlos conectados en todo momento para tenerlos operativos en el momento de usarlos.El ejemplo más frecuente lo encontramos en el televisor.
El término “stand by”, se ha incorporado a nuestro lenguaje cotidiano, de manera que lo usamos en ocasiones cuando nos referimos a periodos de descanso o inactividad. Así, cuando nos concedemos un descanso entre una acción y otra decimos que estamos en “stand by”.Son esos momentos en los que extendemos las piernas un rato tras estar varias horas sentada en el despacho, o cuando nos concedemos una pausa tras la comida. Son breves espacios de tiempo que se consideran necesarios para desconectar y tomar de nuevo la actividad con más vitalidad.
Los cuidadores de las personas dependientes, y sobre todo de las que se encuentran en un estado de gran dependencia, ven cada vez más difícil conseguir este periodo de desconexión de actividad. Esto toma mayor dificultad si nos referimos a los cuidadores de personas con deterioro cognitivo en un estadío moderado-grave.
La ausencia de este respiro en las tareas es uno de los factores que influyen en la aparición del burn out, o síndrome del cuidador quemado. El cual consiste en un profundo desgaste emocional y físico que experimenta la persona que convive y cuida a un enfermo crónico incurable tal como el enfermo de Alzheimer.Los principales síntomas son apatía, cansancio, aislamiento, irritabilidad, dolores musculares, absentismo laboral, etc.
Para prevenirlo es importante tomar medidas, algunas de ellas son:
- Pedir ayuda a las personas más cercanas y que constituyen la red social. Estos son familiares, amigos, vecinos, etc
- Acudir a asociaciones que trabajen por el colectivo. Por ejemplo las Asociaciones de Familiares de Alzheimer.
- Hacer uso de los recursos sociales (públicos y privados). Como es el caso de los cuidados domiciliarios.
- Hacer deporte
- Dedicar un tiempo a la vida social.
Estos momentos permiten el periodo de “stand by” y por lo tanto contribuyen al bienestar físico y psicológico tan necesarios para asumir la gran responsabilidad que conlleva cuidar de los demás.